Encuentros
En la sombra
de mis miedos
saldrá la piel
a tu encuentro.
Tu puerta
será abierta
en la humedad
cuando decidas...
En las fuentes
el contacto
se induce
al contrariarnos.
Y somos,
en la prisa,
el reflejo
de lo oculto.
Contacto
Me acercas
y te acerco.
Lentamente
entre mis dedos
surge ese travieso impulso,
que llega
a las sedas
que te cubren.
Recorro la distancia
entre botón y botón,
se saborean las yemas
de mis dedos,
y llegan por fin
a tu contacto,
absoluto,
a tu piel que se
estrecha
entre tu corazón
y mis manos.
Barreras
Niña insomne
de silencio.
En el giro
los alcances
del vuelo
se vuelven impávidos
y la sangre
se vuelve una
en las muertes
de las almas.
Tal vez
el corazón se impacta
en las barreras
de las masas,
guardando
desiluciones viejas
que no dejan
de buscar.
Eres
Eres
la representación
del olvido
en su forma
imperfecta.
Eres
mi mayor desprecio
en lo bajo
de la náusea.
Eres
encarnación desdicha
en desvarío,
la puerta
del desdén.
Eres
tesoro negro
de humanidades viejas.
Y te hundes
en la crisis
del esperar.
Desorden
Me deslizas
entre sonrisas
y desorden.
Tu caos
se vuelve mío
mientras tus ojos
resuenan.
Tus manos
absorben
la atención
de lo justo.
Se llevan
las claves
de lo perdido.
Los brillos
sonaban
incoherentes,
compartiendo
conmigo
por completo.
Y te hubiera
guardado,
pero mi lealtad
te abandona.
Enigma
En este enigma
se recubren
de azul
las pisadas.
Y de verde
las ilusiones
se llenan.
Araña
Fantasma
que va y viene,
urdiéndome
en su trama.
Me tejes
en el desconcierto
y mis hilos
se entrecruzan estáticos.
Me dejo
ser tejida
en tus manos
que no lo saben.
Témpano
Me deshielo.
En la inmensidad del mar
este témpano
desaparece.
