miércoles, 19 de septiembre de 2007

Historia de Chile


Este 18 tan largo me ha dado la posibilidad de meditar en la historia nacional. Ha sido sorprendente mi cambio en la percepción de la historia.

No sé si me equivoco, pero al menos en mis clases de historia (sin desmerecer a nadie, por favor) no recuerdo exactamente una transmisión de de la real pasión que significan todos y cada uno de los acontecimientos que se vivió en aquélla época. No la vivimos, es evidente, pero creo que es absolutamente necesario el hacernos sentir la incertidumbre, el coraje, los sueños y la lucha vivida en esa época.

Por eso aplaudo la iniciativa de generar una serie con la historia de algunos de los importantes personajes que la historia de nuestro país tiene. Aplaudo la actuación de los que en ella participaron, porque al menos hasta el momento, han sido capaces de traspasarme intensas emociones, de hacerme vibrar con la muestra de humanidad y de pasión, de deslumbrarme con las dificultades y el ingenio para sobrepasarlas. Me he sorprendido pensando “No, NOOOOOO!!!!” cuando veo que algo no resulta durante mi contemplación de las imágenes, alegrándome con los triunfos patriotas, sintiéndome casi en la carne de los protagonistas.

Así debiéramos aprender la historia. Qué importa tanta fecha, qué importa tanto orden!! Eso viene por añadidura. Pero el conseguir ambientarnos, sentirnos parte de esa historia, es algo que debiéramos lograr dentro del “programa educacional”.

No estoy de acuerdo con la guerra. Los que me conocen saben cuánto odio la violencia (llegando al punto incluso de negarme a ver ciertas películas). Pero así y todo, viendo una nación cautiva y burbujeante de intenciones propias, imaginándome el sentir de los que ahí estaban, transportándome 200 años antes, no puedo evitar sentir una suerte de orgullo. Sentir en mi propia carne la opresión, el ansia de libertad la defensa de lo propio, el reconocimiento de una identidad, ha hecho que mire con otros ojos la historia de este país largo y flaco, con sus triunfos y fracasos, sus defectos y virtudes.

Una mitad de mi sangre no pertenece a estas tierras, me ha hecho escuchar durante toda mi vida otra filosofía, otra música, otro idioma, otras costumbres. Esta larga y angosta faja de tierra es la que me vio nacer y me ha visto crecer, y cada vez más me siento más aferrada a su historia. (Suena algo ridículo que relacione esto, no estoy en ningún caso haciendo alarde de nada, sino mostrando por qué esto significa tanto para mí). Es momento de aprender más sobre nuestra patria, de ingresar y actuar en nuestro corazón la historia y hacerla parte de nosotros.

1 comentario:

Anónimo dijo...

COMADRE LOLAAAAAAAAAAAA !!!
FELIZ CUMPLEAÑOS AMIGA,
HARE QUE LO PASES BIEN

UN ABRAZO

CAPITAN RHESO SPARROW